2 de agosto de 1934: muere el presidente del II Reich, Hindeburg. Hitler toma el poder como jefe del Estado y comandante supremo de las fuerzas armadas aun sin ser de sangre alemana.
Hitler, conocía muy bien al militar alemán de aquella época y no se equivocaba al juzgarlo e imponer además esta fórmula. Para un militar, el juramento personal era algo más, mucho más que una vinculación jurídica a través de la Constitución. El juramento de un militar alemán, tenía un carácter más físico incluso que moral, y sobre todo era sagrado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario